CAMBIAR

Ciertos momentos son los que se presentan en la vida las personas se siente acorraladas en una esquina y necesitan de una fuerza o de una marcha mas para darle un vuelco drástico a la situación.

Un empleo agobiante, un carrera que no te llena, hay que tener muchos bemoles para dar carpetazo y buscar algo que verdaderamente les llene y desde aquí les expreso toda mi admiración a esa gente.

Diversas son las maneras que tienen de actuar esas personas, pero sencillamente las podemos clasificar en dos grupos: Aventureros y emprendedores

Al primer grupo pertenecen todos esos que de repente un día deciden de dar carpetazo a su actual vida y se marchan de su actual ciudad a otro sitio totalmente diferente con la esperanza de encontrar allí, ese trabajo, esa ilusión y alegría que le llevaron a cambiar

Y que quede claro de este grupo quedan excluidos todos los “ niños de papa” y demás “elementos” que viajan y van de flor en el flor por el simple hecho de viajar y de estar de fiesta y les da igual el presente ( así que imagínate lo que les importa el futuro)

En el otro grupo están los emprendedores, de estos hay de varios tipos pero yo haría énfasis en los que intentar emprender con la vista mas puesta en el cambio que en la riqueza, en aquellos que arriesgan que invierte casi todo su tiempo con una mentalidad clara.

Sin lugar a duda el mundo es del que arriesga , el que combate el miedo con el insomnio por que una vez llega el día no puede haber miedo, no se puede perder el tiempo, ya que de este amenas hay.

Crear algo nuevo desarrollar la materia gris hasta encontrar la idea perfecta, que desarrollar es magnifico.

Dentro de los emprendedores y aunque pueda sonar ha letra de cuento para dormir me producen admiración y denotan gran personalidad y sensatez aquellos que en su mente esta el poder dar trabajo.

Antes de acabar si me gustaría dejar una cosa clara, que ha todos estos no se le suban las cosas a la cabeza , y mantengan las amistades no sean como pozo sin fondo, muy grande pero vacio

El insensato de la semana es para Maria del Mar Mallorquín, por no estar en armonía su manifestaciones sociopolíticas con su pasotismo.

El premio de la sensatez es para Natalia Sánchez por preocuparse por la sensatez de los demás

El consejo de la semana: Abre la mente