RECUPERAR

Este título, así de primeras es un poco ambiguo. ¿Recuperar? ¿Qué?, ¿Recuperar el tiempo perdido?, ¿Recuperar la chaqueta que te dejaste en el autobús?, ¿Recuperar las esperanzas? etc. Todo esto está muy bien, pero lo que viene siendo para el blog… no lo acabo de ver.

Primero, la chaqueta, olvídate de ella que ya no la encuentras; y el resto de cosas, lo mismo, para un libro de autoayuda o de dejar de fumar… pero aquí, no acaba de cuadrar.

Pues sí señores, como seguro los más avispados ya se habrán figurado, esta semana, este blog tratara de la recuperación de asignaturas en lo que al mundo académico se refiere.

Para poder observar con lentes adecuadas, habría que saber cuáles fueron las circunstancias que avocaron al alumno al fracaso. Desde mi humilde sillón y tras pararme a pensar, por lo menos un minuto, he conseguido sacar una lista de posibles causas:

            -Gandulería: Esta causa es la más deleznable y sus protagonistas merecen sin lugar a dudas “un par de collejas bien das en la cepa de la oreja”. Estos “elementos” en cuestión, no han estudiado sencillamente porque no les ha dado la gana o esperaban que pasase algún milagro. Al final, parece que se ha hecho justicia y si quieren aprobar, han de pasar primero por el peaje de la recuperación

            -No ha podido ser: Esta gente son todos aquellos que lo han intentado pero al final resulta que no han conseguido. Que no desesperen, que le echen un poco más de huevos y ya verán como al final logran superarlo.

            -Abandono justificado: Cada estudiante lleva consigo una serie de circunstancias intrinsicas, las cuales por unas cuestiones u otras no le han permitido volcarse en esta materia y como es lógico han de recuperar. Bueno, confiamos en que las cosas cambien y para la recuperación puedan darlo todo.

Pero claro, es que el verano es verano, no te vas a tirar todo el día estudiando. Habrá que lucir palmito, ir a la playa, helados, cervezas y esto, y lo otro, y lo de más allá… Luego, cuando te vienes a dar cuenta, estamos en septiembre y todavía con el número del profesor de clases particulares en la mesilla. ¡¡Lechones céntrense!!.  

Aquí, en verano, es cuando demuestran los muchachos y las muchachas que tienen algo de seso en “eso” que se llama cerebro y sacrifican un poco el gozo veraniego.

Ya sé, que todos los que tienen que recuperar no son como los muchachos y muchachas de la estrofa anterior. Pero desde mi posición de observador, he divisado un par de ellos que, lo que viene siendo buen camino, no llevan. Todos pueden mejorar, con un poco de esfuerzo, ¡Ánimo que aún queda tiempo de sobra!.

No os desearé suerte, eso es para los débiles. En este caso utilizare una frase de una amiga mía: Esfuerzo y que se haga justicia

El consejo de la semana es: Más vale hacer daño con la verdad, que dar pomada con la mentira

Al igual que otras semanas, podéis sugerir un tema para destrozar en este blog y nuevamente agradecemos su colaboración a Elena R.P.