No
se si mis amados lectores han caído en la cuenta de que no todo
siempre viene de cara. Que por mucho que nos esforzamos la rueca del
destino parece manejada por el mismísimo Belcebú.
Es
en ese momento cuando es clave nuestra forma de actuar. Saber
salir de un buen atrancamiento sin destrozar el material está
solo en las manos de auténticos magos.
Steve
Urkel un
personaje mítico de la televisión de los 90, caracterizado por sus
pintas de pardillo y una gran inteligencia tenía la torpeza como su
seña de identidad, pese a tener una gran inteligencia su papel de
bufón se veía envuelto siempre de un error tras otro, los cuales
acompaña de la coletilla “¿He sido yo..?”
Winston
Lobo es un personaje de la película Pulp Fiction
cuya función principal es solucionar problemas, el bueno del señor
Lobo no es en el fondo el paradigma de la inteligencia y la
estrategia, utiliza un concepto para muchos
de vosotros desconocido “la lógica”. Ya
que si tienes un manchurron de sangre en medio del comedor lo primero
que hay que hacer es limpiarlo, vamos que tampoco hace falta estudiar
una ingeniería para dilucidar
tan elocuente respuesta.
Normalmente
somos del gen comodón y el tema victimismo nos pone verracos,
por eso cuando
el espíritu espíritu
del
bueno del señor Urkel nos
posee y hacemos pifias a diestro y siniestro,
o cuando el destino nos reparte cartas a la mala idea solemos
agobiarnos. Es
en esos momentos donde, como sucediese en el film de Quentin, tenemos
que llamar al señor Winston para que ponga solución, éste con una
actitud tranquila dice lo que la lógica dicta, piensa con
tranquilidad y no se deja llevar por los nervios. Metafóricamente
nos da un tortazo que nos quita la venda de los ojos y nos permite
ver las cosas con más claridad.
Las
cosas no son blancas o negras, no se es bufón o genio, por lo tanto
no se es Urkel o Lobo. por lo tanto no se es Urkel o Lobo. Quizás
para algunos seamos Urkel en nuestra vida y el Sr Lobo para otras
personas. Lo suyo seria ser resolutivos y calmados pero según dicta
la señora experiencia
eso es más bien una utopía.
Por eso nos tenemos que conformar con tener a mano alguien que
“solucione problemas”.
El consejo de la semana
es : Si alguien te cae mal, te cae mal...
Dar las gracias a Rocío Rodríguez por su
colaboración en el blog.
Queridos
lectores hacer el favor sugerirme temas. La
próxima semana fijaré
la fecha de cierre para
el blog.
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