En
una sociedad como actual en la que el estrés nos sale por los ojos y
vamos de un lado para otro enflechados, tener alguna afición que nos
haga detenernos un momento y observar las cosas con calma y relajación
es realmente saludable.
La
mayoría de mis lectores no son fans de pararse a observa,r cosa que yo
sí. En mis paseos me gusta contemplar y analizar las diferentes formas
de vida que surgen a mi alrededor. Otra de las cosas que también
observo con gran deleite es la costumbre de poner macetas en las puertas
y ventanas.
Tener
una afición como ésta y realmente cuidarlas con cariño es algo
realmente poético. Tener una maceta en su recipiente más oportuno con la
tierra justa y todo colocado correctamente para que el agua del riego
no se desaproveche es algo que por desgracia pocos aprecian, pero a un
gurú como yo el corazón se me llena de alegría.
España
siempre ha sido un lugar muy "macetero" cosa que por desgracia se está
perdiendo, esto esta quedando en el olvido y solo en el perfil de
personas de elevada edad. Ya los barrios son más grises en una sociedad
avanzada como la nuestra si uno quiere una maceta la pone en su huerto
virtual y ya está.
Cierto
barrio de una ciudad andaluza es famoso por sus calles decoradas con
macetas y el espectáculo que se produce en dicha zona en primavera no
hay palabras para describirlo. No estoy diciendo que todas las calles de
España tengan que ser así y que vuestro balcón sea un bosque. Pero
incorporar color y alegría a nuestras vidas siempre es algo positivo,
inundar nuestros barrios en primavera de ese olor fresco que producen
las flores no tiene precio.
Conclusión: dale alegría y color a la vida.
Consejo de la semana: Pasea
Dar las gracias a Rocío Rodríguez Pérez por su colaboración. Nos vemos el próximo martes.
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