DE MARRANO A MODERNO

La verdad es que la línea es demasiado fina, así de primeras y a ojo de buen cubero no te creas que es fácil diferenciarlos, a veces una camisa de cuadros y unas gafas de sol es lo único que marca la diferencia.

El otro día después de varios días de estudio llevaba un outfit un poco descuidado: camisa naranja de propaganda, unos pantalones vaqueros viejos con los bajos bastante desgastados y unas deportivas cubrían mis pies. A esto hay que añadir una barba de varios días que de mí se había apoderado.

Yo -como personal shopper- soy muy de estar al tanto de las diferentes modas y no paro de ver páginas que me indiquen que outfits son los más adecuados, y no sé si los cabrones tienen un grupo de WhatsApp donde no me han metido, la cosa es que todos coinciden en lo mismo ¿a quién siguen?, ¿quién es el jodido mesías de los gurús de la moda?, ¿quién es el puto dios que se levanta un martes de primavera, huele el ambiente y dice este invierno lo moderno va a ser…?

Volviendo a mis aventuras, en de repente tenia que ir a toda prisa a un lado, con lo que me quité la camiseta naranja cogí una camisa frondosa a cuadros y unas gafas de sol en post de cuidar mis vista y salí a toda prisa sin percatarme mucho.

Hay gente que se creen gurús de la moda y se merecen un aplauso por ser tan arriesgados, porque las prendas que llevan algunos en las exposición ARCO pecarían de modernas, pero oye si son felices…

Cuando ya en el ascensor me fijo en mis pintas dije para mis adentros, hay que ver, antes en un barrio de pijos me darían de hostias por marrano y ahora en el hogar me caería la del pulpo por moderno, como pueden cambiar las cosas en 10 segundos.

El resumen con respeto, viste como te salga el pijo.

Consejo semanal come frutos secos.

Dar las gracias a Rocío Rodríguez Pérez. No sed tontos y proponed algún tema vosotros también. Nos vemos el próximo martes.