Todos tenemos claro que unas buenas costillas a la plancha son
un placer de otra galaxia, pero si tenemos un conocido que el fin de semana
pasado fue a un restaurante y pidió carne de arce canadiense, pese a que
nuestro amigo no le convenciese mucho el resultado, nosotros comemos carne de
arce canadiense, si vamos a ese restaurante.
El tiempo libre es uno de los grandes aliados del consumismo,
menos mal que hay ciertas páginas en Internet para librarnos de esas compras
que no se tenían que haber producido, y que ya sea otro el que entre en la rueda
del ciclo vicioso del consumismo.
Las tiendas son muy picarás y te dejan dar vueltas por ellas
disfrutando de su ambiente sin tener que realizar un gasto mínimo. Lo que en el
fondo para la gente moderna de hoy en día es un lobo con piel de cordero. Tu un
sábado por la tarde si quieres salir a darte una vuelta, tienes cierto nivel
no te vas a ir a andar como los viejos ni te vas al bar como un Walter
cualquiera, pues te vas a ver tiendas que se está a gusto y por mirar no cobran.
Pues ahí amigo ya te la han metido dobla. Si, no te cobran, no, pero venga mirar,
venga mirar que al final la vena
consumista sale y de repente tienes en tu armario dos camisetas prácticamente iguales,
que pensándolo fríamente si te pones una vez cada una puedes estar contento.
Todos creo que tenemos claro que un consumismo descontrolado es
malo, pero si a ese coctel le metes un decilitros de envidia la mezcla resultante
es explosiva.
Como conclusión: Si te hace feliz el consumismo desaforado pues pegale,
pero que sepas que a lo mejor un poco de cabeza, no te vendría más.
Pd: ¿Os habéis fijado que da igual el orden en que se lean los párrafos,
el sentido del texto es el mismo?
Utiliza bombillas L.E.D.
No sed tontos y proponed algún tema vosotros
también. Nos vemos el próximo martes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario