Tras un periodo que
suele ser caracterizado por copiosas comidas y por el elevado consumo de
alcohol, las salidas han proliferado exponencialmente.
Como ya
comenté en otros posteados numerosos son los encuentros en este periodo que
ahora dejamos atrás.
Todos estos detalles en su conjunto, nos llevan a crear una
pequeña nebulosa que nos obliga ha abstraernos de la realidad.
Pues queridos míos, todo tiene un final.
Como
sucede al finalizar las vacaciones estivales, es fácil que nos cautive un
pequeño periodo de depresión, la vuelta a la realidad en muchos casos se hace
costosa y dura.
Los primeros días expulsaremos miles de maldiciones hasta que
al final la costumbre se instaure en nosotros.
Pese
a ser un corto periodo el que hemos estado abstraídos de la normalidad, la
navidad tiene un poder especial, ya que tiene un aspecto mucho más cercano a la
reunión que cualquier otro periodo del año, es por esto que ciertos recuerdos y
buenos momentos nos intentan atar a un mundo que por desgracia se escapa de la
realidad.
Otro
motivo por el que el principio del año se nos hace más pesado, es nuestro
propio peso, las básculas parecen tenernos manía y están confabuladass en actuar
en nuestra contra.
Nuestros estilizados cuerpos parecen amar mucho la navidad, por
ello que quieran guardas restos de ella en nuestro interior.
Entre
pitos y flautas los excesos nos han dejado un cuerpo un poco desajustado ,
pero ya que eso fuera todo lo malo de este mundo, porque con un poco de sopa y
unos días de adaptación lo podríamos solucionar
Como
al parecer me he dejado la inspiración abandonada en el 2013 seguiré comentado
una serie de retahílas y clásicos de esta época.
Y como no podrían faltar los propósitos
relacionados con el nuevo año, esas listas de cosas que llevamos un porrón de
tiempo deseando hacer pero que por desgracia solo se pueden intentar su
realización al principio del año.
Viajar
más, aprender idiomas, ponerse fuerte, etc etc . Suele ocupar nuestras
intenciones para principios del año, intenciones que bien por unas cosas u
otras se quedan en eso mismo, en meras intenciones.
Pero
bueno señores, hay que afrontar el año con la mayor fuerza posible, no hay que
tenerle miedo, al principio se nos puede presentar muy oscuro , pero con fuerza
y rodeados de buena gente se podrán derivar todos los muros.
El consejo para esta
semana es: Constancia
Quisiera dar las
gracias por su colaboración a Elena Rodríguez Pérez. Y al igual que en otras
semanas invitar a todo aquel que tenga un tema en mente y quiera que se
destroce aquí, que me lo haga saber.
Si alguien sugiere
una nueva forma de conseguir a la finalización del año el sensato, que me lo
haga saber
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