No hay que ser ningún mega experto en marketing para saber que es idóneo adaptar nuestro establecimiento de venta al público hacia el que va destinado, de ahí que si tú tienes una peluquería para público femenino la decoración se base en pósteres con distintos peinados y revistas para hacer la espera una chispa más amena.
También diversos estudios han demostrado que incorporar ciertos tipos de música, suele favorecer las compras, esto último es un estrategia fuertementemente explotada por los centros comerciales.
Si unimos estos dos conceptos antes explicados llegamos a unas tiendas donde uno no sabe si pedir una camiseta de su talla o pedir un cubata, ciertos establecimientos suelen llevar a tal extremo el tema de la música que en ocasiones se hace hasta difícil la estancia en el local, he estado en conciertos donde se podía hablar a un volumen más bajo que en muchas tiendas.
No sé si porque tengo pinta de maleante empedernido o porque no saben de mis dotes de personal shopper, la cosa es que cuando entro a ciertos establecimientos ya tengo pegada a mi espalda a la dependienta preguntándome si necesito algo; pero muchacha de dios, déjame un poco de tiempo para que me puedan surgir dudas, no convencida con que le avisaría si me surge algún problema la muchacha decide seguirme por todo el discopub. Veo muy bien que hay que incitar a las compras pero ese acoso y derribo se pasa de castaño oscuro y sé de lo que me hablo.
En contrapunto hay otras tiendas donde por momentos uno parece el gerente del garito llegando incluso desconocidos a pedirte tallas de camisetas, pero es que los clientes somos la ostia consagrá, que si estas mucho me agobias que si estas poco me tienes abandonado, Dios cubra de paciencia a los dependientes.
A la hora de pedir consejo también podremos medir la dignidad del dependiente, observando si únicamente tiene ganas de vender a toda costa, o prefiere que una persona compre cierta camisa aunque parezca un espantajo.
Podría seguir diciendo cosas y dando consejos al respecto pero no es cuestión de que os tengáis que hartar a leer. Así que si os ha parecido poco decidme y seguimos otro día con el tema.
Como conclusión no sed tontos e id a las tiendas donde aparte de buen precio y calidad estéis y os traten bien.
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Dar las gracias a Rocío Rodríguez Pérez por su colaboración. No sed tontos y proponed algún tema vosotros también. Nos vemos el próximo martes.
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